Hace unas semanas en Informe Insólito nos enfrentábamos a uno de los misterios que aún a día de hoy sacuden a la paleontología. Hablábamos del verdadero aspecto y hábitos del T. rex. Sin embargo, cuando se habla de animales de los que se obtienen todos los datos a partir de exclusivamente un amasijo de huesos, es normal que surjan dudas. Historias como la del Tiranosaurio ocurren también con muchas otras especies de los ya extintos dinosaurios, como los raptores.
La gran pantalla es la que hace que una idea determinada penetre en las mentes de los espectadores y se quede ahí fijada, resistiéndose fuertemente a salir. Los raptores son un grupo de dinosaurios carnívoros cazadores que vivieron en el Cretácico. Existieron múltiples especies por los territorios que componen hoy Norteamérica y Asia. Siempre fueron vistos como lagartos grande bípedos. Sin embargo, en el año 2.000 la idea cambió rotundamente debido a un importante hallazgo paleontológico. Se hallaron plumas fosilizadas. Es posible que las plumas se originasen a partir de escamas desplegables que permitían a los dinosaurios mantener la temperatura. Sin embargo, las plumas pudieron ser aún más útiles. La biomecánica y dinámica del movimiento de estos animales nos dice que incluso pudieron jugar un papel fundamental en la persecución de las presas.
Quizá el aspecto verdadero que tuvieron los raptores pueda parecer que no eran tan feroces como el cine ha enseñado. Sin embargo, a pesar de que las enormes garras quedan casi cubiertas por las plumas, no dejan de ser peligrosas. De este modo, no estuvo hasta hace poco demasiado claro el papel de la enorme garra interior de las patas. ¿Cómo funcionaba? Tradicionalmente se pensó que saltaban sobre su víctima, aferrándose a ella con las patas delanteras y empleando las traseras para desgarran grandes fragmentos de tejido.
¿Cómo actuaban entonces en la caza? Los paleontólogos intuyen que los raptores se centraban más en clavar su afilada garra en zonas concretas del cuerpo de la presa, especialmente donde se localizaban arterias y venas importantes, lo que hubiera llevado a la muerte por desangrado de su víctima.
El Deinonychus ha sido una de las especies que más ha contribuido al cambio de mentalidad respecto al estudio y comprensión de los dinosaruios. Uno de los datos más sorprendentes sobre la especies es la enorme cantidad de cambios que se producían en ellos en función del momento de su desarrollo. Muchas caracterísiticas de los tejidos indican que se trataba de animales de rápido crecimiento. Además, en el caso de los individuos jóvenes, la anatomía de los huesos de las extremidades anteriores indica que podían llevar a cabo un movimiento similar a un aleteo. Ello sumado al hecho de que las crías pasarían tiempo en los árboles como medio de protección lleva a pensar que podrían haber incluso realizado planeos.
Los raptores no dejan indiferente a nadie una vez el sujeto es consciente de la existencia de estos reptiles. Pero quedan aún más impactados cuando descubren su verdadero aspecto. Cada página que se adelante en la paleontología no solo permite poner fín a sucesiones de errores de comprensión en el pasado, sino que permite también ampliar aún más la fascinación por la naturaleza y en particular por estas bellas criaturas.
Artículo muy interesante y educor.
Estimada lectora:
Me alegro de que haya encontrado interesante y educativo el artículo. Mi intención profesional y a la de los integrantes de Informe Insólito es llevar el conocimiento a las personas en lo relativo a temas que el periodismo no suele explicar.
Un saludo.
hola buen día por aquí ,lo que voy a adjuntar tiene que ver con la nota publicada por «insólito»,y en lo personal me llena de orgullo ya que en el grupo hay compatriotas (argentinos/as),donde restablecieron
una nueva fecha de origen ,creo despertara el interés de la paleontologia internacional,
http://www.losandes.com.ar/article/hallazgo-de-paleontologas-argentinas
salute a todos/as ,que terminen bien y comiencen mejor.-(15-16)
Estimado lector,
Muchas gracias por el enlace. Le daré una ojeada porque estoy seguro de que encontraré cosas interesantísimas. Tenga igualmente usted una bellísima entrada en 2016.
Un saludo.