La rabia, sin duda alguna, la enfermedad de origen animal más importante del Hemisferio Norte. Afecta a muchas especies animales, tanto domesticas como salvajes, afectando también a humanos. Esta erradicada en la amplia mayoría de los países europeos, aunque se suelen producir casos aislados. La enfermedad afecta a unas 50.000 criaturas cada año. En España, la rabia se dio por erradicada en el ano 1978, aunque se han dado casos esporádicos en las ciudad autónomas de Ceuta y Melilla, especialmente por perros llegados de Marruecos.
Es producida por el Rhabdovirus, incapaz de atravesar la piel intacta del potencial hospedador. La forma mas común de transmisión es a través de mordeduras, así como al contacto de la saliva del animal afectado con las mucosas de animal o humano al que muerde. Se trata de un virus muy débil, y sobrevive muy poco tiempo fuera de un hospedador.
La primera parada del virus en el cuerpo de su hospedador es el encéfalo, a partir del cual se diseminará por todo el sistema nervioso periférico y llegando también a las glándulas salivares (aumentando la producción de saliva y asegurándose la transmisión).
El primer síntoma de la rabia (especialmente en perros) consta de un cambio repentino de comportamiento, aunque también puede no haber dicho cambio. Dicho cambio dura unos 2-3 días. Tras ello, se produce la llamada rabia furiosa o muda, aunque ambas pueden también alternarse. Entre 3 y 7 días después ocurre la muerte del animal.
- Rabia furiosa, muchas veces, la única visión que las personas tienen de esta enfermedad. Los perros son agresivos, muerden objetos tanto reales como imaginarios, hasta el punto de producirse heridas en el hocico y las encías. Los animales pueden sufrir fotofobia e hidrofobia (palabra que también se usa para nombrar la enfermedad). Suelen perder el reflejo corneal. Tras 1-4 días, estos síntomas son sustituidos por una parálisis progresiva.
- Rabia muda, la agresividad es menor, hasta el punto que los animales rara vez atacan, a menos que sean provocados. La mandíbula queda bloqueada, y la lengua cuelga. Los perros no pueden comer ni beber. La parálisis continua progresando hasta afectar a los músculos respiratorios, lo cual produce la muerte.
Mapa de España en que se muestran en morado aquellas regiones en que la vacunación de animales domésticos contra la rabia es obligatoria, mientras que en azul se muestran las regiones donde dicha vacunación es voluntaria.
- Obligatoria:
Andalucía, Región de Murcia, Comunidad Valenciana, Islas Baleares, Islas Canarias, Castilla-La Mancha, Comunidad de Madrid, Castilla y Leon, Extremadura, Aragón, La Rioja, Comunidad Foral de Navarra, Cantabria, Principado de Asturias, Ceuta y Melilla.
- Voluntaria:
Cataluña, Galicia y País Vasco.
La rabia es importante a nivel social pues esta entre las enfermedades comunes del mejor amigo del hombre. En el medio exterior, quizá los mamíferos más importantes en afares de transmisión de dicha enfermedad sean los murciélagos. Cierto es que pueden incluso sobrevivir a la misma. Aquellos murciélagos afectados no pueden desarrollar el vuelo, y suelen caer al suelo, sobre el que se desplazan dando tumbos. Bajo ningún concepto deben tocarse ni manipularse dichos animales. Una simple mordedura es suficiente para transmitir el virus.
Los murciélagos vampiro componen tres especies, de las cuales una de ellas es la principal transmisora de la rabia en América Central y del Sur, ya que suele alimentarse de la sangre de mamíferos, incluyendo a los domésticos. Se trata del murciélago vampiro común (Desmodus rotundus). Provoca múltiples perdidas económicas en las explotaciones ganaderas del territorio antes mencionado. También es famoso por alimentarse de sangre humana en medios rurales. Contrariamente a lo que se piensa, no muerde la yugular. Suele hacerlo en las yemas de los dedos.
MADRID, Mayo del 2014, una mujer marroquí muere de rabia tras ser mordida por un perro afectado por dicha enfermedad. Aquel suceso hizo que saltaran las alarmas en lo que a los animales domésticos procedentes de África respectaba. El Ministerio de Agricultura insto a controlar los animales procedentes de dicho continente, que atravesaban la frontera con España a través de Ceuta y Melilla.
Al parecer la victima se habría infectado en octubre del año anterior, en un viaje a Marruecos, donde un perro la mordió en un pie. El periodo de incubación del virus fue muy largo. Y en 2014, en abril, la mujer comenzó a desarrollar síntomas. Sufrió dolor, fiebre y quemazón. La muerte sobrevino el 20 de Mayo.
Los perros provenientes de Marruecos suponen una amenaza, pues se trata de un país donde la rabia es endémica. Un año antes, en 2013, salió a la luz un nuevo caso, esta vez protagonizado por un Pitbull cuyos dueños lo habían llevado a un viaje por Marruecos. El animal atacó a tres niños y un adultos. Al volver del viaje, los dueños se saltaron los protocolos sanitarios.
