Varias semanas atrás han aparecido nuevos casos de animales mutilados en Argentina, mutilaciones extrañas que parecen no ser obra de ningún animal depredador o carroñero. Son mutilaciones que recuerdan a las ya ocurridas hace décadas en diferentes lugares del mundo. Extracciones de órganos y cavidades realizadas con gran precisión llevadas a cabo posiblemente por seres desconocidos, quizás por seres de otros mundos.
Estas últimas mutilaciones se han dado en la localidad de Caminiaga de la provincia de Sobremonte, donde un campesino se quedó impresionado al ver como habían dejado a uno de sus animales, en concreto una vaca. Poseía un corte limpio en la cara, como si lo hubieran realizado con un bisturí para quitarle un trozo de piel. Misteriosamente no había habido hemorragias ni poseía sangre en su cuerpo, había sido vaciado totalmente. Además le faltaba en su totalidad un ojo y la lengua .
En esta zona existe un largo historial de acontecimientos y fenómenos extraños, como desconocidos sonidos, apariciones de seres, devenir de sombras, incluso algún objeto volador no identificado.
Los casos de mutilaciones de ganado no son desconocidos en estas tierras, ya hace muchos años que se vienen dando en Argentina. Aunque al principio se culpaba a alguna anaconda e incluso a algún felino, la ausencia de tejidos desgarrados, la falta de hemorragias y la limpieza de los cortes avivaron siempre el misterio. En EEUU durante la década de los 60 también se registraron varios casos así como en Inglaterra, siempre en zonas agrícolas y granjas donde abunda el ganado vacuno y bovino.
Aquí en España también se han dado casos de mutilaciones en animales, quizás uno de los más importantes fue en La Laguna en Tenerife en abril de 1979 en el barrio de Taco, donde un perro guardián de un almacén apareció muerto por la mañana. De nuevo no había rastro alguno de hemorragias, ni de ningún tipo de violencia. Sin embargo como es habitual en estos casos se le habían extirpado algunos órganos como el corazón y el hígado.
A los cuatros días otro perro aparece muerto en el mismo sitio y sin ninguna gota de sangre en su cuerpo. Lo que si se mostraba en los cuerpos de los dos perros eran dos orificios en la piel por dónde sorbieron toda la sangre.
A los quince días a unos pocos kilómetros, en otro barrio de La Laguna aparecieron un cerdo y varias cabras en las mismas condiciones, sin sangre y sin vísceras. Aunque la policía culpara de los hechos a un extraño y misterioso roedor, según los que practicaron las autopsias todo parecía indicar el empleo de instrumental quirúrgico avanzado.
No sólo los animales han sido víctimas de las mutilaciones, existen casos donde las víctimas eran humanos. Uno de los más conocidos fue el caso de Guarapiranga, en Brasil en 1988. Donde apareció un hombre de campo desnudo con unas terribles heridas muy parecidas a los registrados en animales. Este caso fue estudiado por numerosos investigadores e incluso algunos ufólogos del país como Gevaerd, o Claudeir Covo.
Según los informes policiales no había ningún signo externo de violencia, ni ataduras ni resistencia y nunca en sus dilatadas carreras habían visto nada tan atroz. El cuerpo presentaba múltiples cortes e incisiones sin rastro alguno de hemorragia o desgarro de tejidos, eran cortes muy limpios y precisos.
Según los forenses nunca habían visto nada parecido ya que numerosos órganos y algunas partes del interior del cuerpo habían sido extraídos por succión a través de una serie de orificios realizados en el cuerpo. Orificios que presentaban los bordes amoratados y cauterizado. Hallazgo que produjo asombro a los especialistas así como la aparente falta de descomposición de la carne y de mal olor. Tampoco parecía presentar rigor mortis o rigidez cadavérica aun después de llevar el cuerpo muerto entre 48 y 72 horas.
Los labios, la lengua y la mandíbula de este sujeto, al igual que había ocurrido varias veces con el ganado fueron extirpados por completo . Los ojos y oídos también fueron extraídos con total precisión y la cavidad de la boca totalmente vaciada. La mayoría de órganos fueron extirpados y algunos músculos así como la ejecución de profundas perforaciones y vaciado del tórax, la cabeza, el cuello, el abdomen, las piernas y los brazos. Como final de esta terrorífica y penosa operación más partes del cuerpo fueron mutiladas. El escroto presentaba una incisión elíptica, el ano y el recto extraídos, y el intestino grueso había sido absorbido por un orificio mostrándose una falta total de vello de estas zonas.
Todas estas supuestas cirugías, según los forenses, habían sido realizadas con la victima viva ya que presentaba edemas cerebrales e infarto. Había sido mutilado con vida, no se habían compadecido de él, habido sido atacado sin escrúpulos como si se tratara de un simple cobaya.
Se barajaron varios culpables de tal atrocidad, como el famoso y desconocido chupa cabra, roedores desconocidos, grupos satánicos o sectarios, alguna criatura desconocida o incluso experimentos secretos.
Según los investigadores de estos casos, proponen que se trata de una operación inteligente y premeditada. Pero, ¿quien es capaz de hacer esta salvajada?. Pues según ellos no sería descabellado pensar en un culpable o varios culpables desconocidos, quizás procedentes de otros mundos, o de otra dimensión desconocida. Ya que no son nuevos los testimonios de avistamiento de Ovnis secuestrando animales como vacas.
Estas mutilaciones seguirán siendo un misterio, aunque sí parece estar claro para estos despiadados cirujanos, es la necesidad de extraer órganos y tejidos en casi perfecto estado, así como cavidades y músculos, para quizás su utilización en clonación, implantes o cultivos de células…
