¿Hubo hibridación entre el Hombre de Neandertal y el Hombre moderno?

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La relación que mantuvieron el hombre de Neandertal y el Homo sapiens es otro de los grandes misterios de la paleontología. Sin embargo, ambas especies coincidieron durante miles de años en Europa y Oriente Próximo, y hacia el sur hasta la Península del Sinaí. Hace 27.000 años se produjo la extinción del hombre de Neandertal, aunque no la del Homo sapiens. ¿Qué ocurrió exactamente? ¿Fuimos homicidas? ¿Fue la selección natural?

neandertal
Todo en los neandertales estaba pensado para conservar el calor. Su nariz grande, rasgo habitual no solo en ellos, sino en muchos de los herbívoros que habitaban aquellas tierras, permite calentar el aire antes de aspirarlo.

El Neandertal poseía numerosas adaptaciones al frío imperante en aquella época. Gran parte de Europa estaba bajo el hielo, y el nivel del mar era mucho más bajo. Zonas que hoy están bajos las aguas de Mar del Norte eran en aquellos momentos fértiles praderas de hierba verde donde pastaban mamuts, ciervos y otros grandes herbívoros.

Desde el descubrimiento de los fósiles de esta especie en el valle alemán que les da nombre (a 10 kilómetros de Dusseldorf), hubo mucha polémica entorno a cuál era su verdadero aspecto. Las primeras representaciones lo mostraban casi como un gran simio, cubierto de pelo, poco más que un chimpancé o gorila. Sin embargo, conforme los estudios avanzaron, su imagen cambió mucho. Se sabe que eran bastante similares a los seres humanos actuales. No eran tan altos, ya que no sobrepasaban el metro sesenta. Eran más robustos, con el característico tórax en barril, y una potente musculatura similar a la de un culturista.

Su cráneo si presenta diferencias notables con respecto al nuestro. Su capacidad craneal era mayor. Su frente era mucho más huidiza, y su mandíbula inferior más grande y prominente. La posición de la tráquea en el cuello y la longitud proporcional del mismo indican que no podrían articular lenguajes complejos. Su comunicación verbal estaría por ello bastante más limitada que la del Homo sapiens.

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Comparación del cráneo de un hombre moderno (izquierda) con el de un neandertal (derecha). Es notable la mayor capacidad craneal del segundo.

Sus bebés, eran más grandes que los actuales. Para facilitar el parto, las caderas de las mujeres neandertales es más alta que la de las mujeres actuales. Ello permitía una mayor extensión del cuello del útero.

Eran casi exclusivamente carnívoros, ya que en los hielos perpetuos, casi no crecían plantas además de herbáceas. En las estaciones más cálidas incluían algunos frutos, raíces y tubérculos a su dieta. Mantener esos formidables cuerpos a salvo del calor tenía un coste metabólico altísimo. Cada neandertal necesitaba al menos, 6.000 calorías al día para mantenerse con vida. No eran raras las muertes de muchos individuos jóvenes, incluso poco tiempo después de nacer y los adultos raramente pasaban de los cuarenta años de edad.

Es posible que ambas especies humanas se hubiesen ignorado. Pero entonces, ¿por qué se extinguió el Neandertal? Por extraño que parezca, cuando dos especies explotan el mismo medio, y una de ellas está mejor adaptada o desarrolla medios más eficientes para procurarse el alimento, aunque no exista una competencia directa, la otra especie se ve condenada a la extinción.

Si excavamos más en la paleontología encontramos también pistas de posibles cruces entre ambas especies. Los hombres modernos poseemos en nuestros genomas información procedente de la hibridación antigua con los neandertales. Entre el 1 y el 5% de los genes de los humanos euroasiáticos proceden de los neandertales. El porcentaje puede variar según las zonas y además, en 2014 se secuenció el genoma de un cuerpo humano encontrado en Siberia con 45.000 años de antigüedad, que contenía un 21% de genes de neandertal. Así mismo, son bastantes los cuerpos encontrados de individuos que muestran características morfológicas mixtas de ambas especies.

Muchos genes que pasaron de los neandertales a los Homo sapiens recién salidos de África, dotaron a la segunda especie de mejores adaptaciones a la vida en lo que hoy llamamos el viejo continente. Entre ellos, muchos relacionados con el color de la piel, el pelo o algunas enfermedades como la diabetes o el lupus. Dichos genes fueron seleccionados positivamente. Sin embargo, se ha encontrado el efecto contrario en las poblaciones de neandertales. Las combinaciones genéticas de ambas especies nos muestran que solían dar infertilidad masculina, lo que se traduce como una casi incompatibilidad de ambas especies. De ahí extraemos que los descendientes de padre humano y madre neandertal serían con casi toda seguridad, estériles. Por ello, estas hibridaciones, sumadas a los cambios climáticos y la extinción de sus presas, llevaron poco a poco a los neandertales a su extinción, hace unos 27.000 años.

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Juan José Alférez Cara
Biólogo. Le fascina la naturaleza y esa fuerza moduladora que durante millones de años ha dado lugar a todas las formas de vida que hoy habitan La Tierra, llamada Evolución, y que también ha servido de lienzo para las leyendas de todos esos escritores desde la Antigua Grecia hasta el Siglo XXI. Contacto:juanjoalferez1@gmail.com

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