Corea del Norte sigue mostrando al mundo su supuesto poderío militar, sigue con su proceso de exhibición de sus armas letales a los enemigos más cercanos, a vecinos como Corea del Sur y Japón y más lejanos como EEUU. Esta vez ha sido con el lanzamiento de un supuesto misil intercontinental alertando a toda la comunidad mundial y demás administraciones reguladoras en materia ambiental y de seguridad nuclear.
Corea del Norte con su inestable líder a la cabeza, King Jong-un, ha sido noticia mundial debido al lanzamiento en estos días, en concreto el día 7 de febrero a las 09:00 horas local, un “misil” de largo alcance ha sido lanzado para colocar en órbita un satélite de observación meteorológica y terrestre. De nuevo sus vecinos salieron a la palestra condenando estas acciones. Todo indica que el presidente norcoreano quiere hacerse respetar a base de propaganda militar. ¿Pero es tan fiero como lo pintan o todo resulta ser un farol para mantener a raya a sus enemigos?
Los especialistas en misiles y balística opinan que este tipo de lanzamiento no corresponde en absoluto a un misil intercontinental de largo alcance o ICBM (Intercontinental Ballistic Missile) como nos quieren hacer creer los medios y algunos gobiernos. Aunque hayan aparecido restos del cohete al sur de Japón y Corea del Sur, el misil lanzado sólo ha llevado una trayectoria ascendente hasta desintegrarse una vez puesto en órbita al satélite KMS-4, es más un cohete de lanzamiento espacial. Si se tratara de un ICBM hubiera realizado un movimiento ascendente y después otro descendente a una velocidad extrema en busca del blanco.
Lo que realmente no ha gustado al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas es que avisaron de este lanzamiento para unas fechas determinadas y al final lo han ejecutado en otras. El lanzamiento estaba planeado entre los días 8 y 25 de febrero, pero fue adelantado al día 7, no siendo la primera vez que Corea no cumple con las fechas programadas. Tampoco es el único caso de lanzamiento de misiles efectuado por Corea del Norte, ya en abril del 2009 se lanzó uno para poner en órbita a otro satélite, el Kwangmyongson‐2 y en diciembre de 2012 también para poner en órbita otro. Se publicó por los medios de comunicación por aquel entonces que eran ensayos encubiertos de misiles de mediano y largo alcance respectivamente. Todo parece indicar que en absoluto llegó a ser tal tipo de prueba desafiante ya que incluso el Comando de Defensa Aeroespacial Norteamericano afirmó que el cohete desplegó un objeto que pareció entrar en órbita.
Recordemos que EE.UU. ha realizado en los últimos meses también varios lanzamientos de misiles balísticos por ejemplo en noviembre del 2015, desde un submarino, el Kentucky, en el Pacífico, visible desde California y varios estados en una atrevida demostración de potencia pese a que las autoridades militares lo nieguen y lo tratan como simples ejercicios de adiestramiento en el océano. Aparecieron varias imágenes que dieron la vuelta al mundo de algo que en principio no se sabía que era, al final resultó ser un Trident II, un SLBM, (Submarine-Launched Ballistic Missile), un misil submarino intercontinental.
Hace pocas semanas, el 6 de enero, Corea del Norte detonó también una bomba de Hidrógeno que conmocionó a todo el mundo, aunque realmente existen dudas de si fue así. Los medios de comunicación informaron sobre esta detonación pero científicos y entendidos en la materia creen que fue una bomba atómica normal. Ya que los registros obtenidos son bastantes similares a los que se recogieron en 2013 cuando Corea realizó una detonación de una bomba atómica. Los movimientos sísmicos detectados al otro lado de la frontera China llegaron al valor 5 de la escala de Richter los cuales concuerdan con una explosión atómica. Además se hizo como a escondidas, bajo tierra para evitar posibles medidas de gases radiactivos o isótopos en atmósfera.
La bomba de Hidrógeno es mucho más potente, como mínimo 10 veces más que una atómica. La bomba H utiliza la fusión no la fisión, digamos que se trata de dos bombas en una. Una atómica que haga de detonante por fisión, con la rotura de átomos liberando grandísimas cantidades de energía, consiguiendo temperaturas altísimas y así poder fusionar los átomos de hidrógeno y generar la explosión.
¿Es Corea del Norte tan peligroso como nos lo pintan?, ¿tienen tanta tecnología como para haber desarrollado una cabeza nuclear que pueda ser montada en un misil?, ¿son los únicos que realizan este tipo de acciones temerarias?, ¿están alimentando el odio hacia Corea del Norte para justificar una ataque o intervención de EE.UU. y Corea del Sur desde su sistema de defensa avanzado de misiles nucleares THAAD (Terminal High Altitude Area Defense)?, ¿porqué se siguen efectuando pruebas nucleares con los riesgos que esto conlleva para la salud del medioambiente y de la humanidad?, ¿porqué los organismos y consejos reguladores no ponen todo su empeño en paralizar o regularizar de una manera más firme estas acciones de cualquier superpotencia?.
Corea del Norte es una potencia muy bien armada pero no comparable con el resto. El problema radica en quien dirige Corea del Norte, que es un dictador y ejecutor, y no se sabe cómo puede reaccionar ante un conflicto, por eso no deberíamos darle una importancia extrema. El resto de potencias EE.UU., Rusia, China, Corea del Sur, Japón, U.K. o Francia lideran el ranking, llevan decenas de años experimentando con energías nucleares y termonucleares, conocidas y secretas. Deberían dar buen ejemplo y no entrar en un juego provocador de poderío armamentístico y así no alimentar odio ni rivalidad entre países en una materia tan delicada y de dimensiones tan devastadoras.