El pasado 13 de noviembre, un atentado múltiple en diferentes puntos de la capital francesa se cobró la vida de al menos 132 personas. La historia se repite, de nuevo en París, de nuevo el Estado Islámico –y como veremos a continuación-, de nuevo datos que no encajan.
Una de las noticias que más llama la atención (tanto por la similitud con otros atentados en el pasado como por la rareza de la misma) es que se han hallado los pasaportes al lado de los cuerpos de algunos terroristas en el atentado de París. Esta jocosa noticia tuvo su réplica en los atentados contra Charlie Hebdo, cuando uno de los terroristas olvidó su pasaporte en el coche, así como en el 11-S, cuando entre los restos de aquella destrucción sin precedentes, donde incluso las cajas negras de los aviones desaparecieron, se halló el pasaporte intacto de unos de los terroristas.
Por otro lado, es bien sabido que durante las oleadas de refugiados en Europa –de los cuales tan solo el 21% son sirios-, han conseguido entrar miembros del Estado Islámico. De hecho, la policía afirma que al menos uno de los terroristas abatidos en los atentados de París entró a Europa haciéndose pasar por refugiado.
Hace unas semanas, anunciábamos en Informe Insólito que la CIA creó campos de entrenamiento para al-Qaeda en Pakistán y que Bin Laden, líder de la célula terrorista, fue un colaborador en la sombra de la Agencia Central de Inteligencia. La misma historia se ve reflejada en el Estado Islámico -cuya creación pertenece a al-Qaeda-, todo hace indicar que nuevamente países como EEUU o Israel utilizan los ataques de falsa bandera, como podría ser lo sucedido en Paris, para tener excusa y así poder entrar en países a los que subyugar, países donde existe un gran interés económico, político y/o territorial. Este es el caso de Siria, donde desde hace tiempo EEUU y otros países de Occidente están ‘ayudando’ a la eliminación del Estado Islámico. Sin embargo, Al Assad, presidente de Siria, ha manifestado en reiteradas ocasiones su descontento con esta más que dudosa ayuda, culpando a Occidente de expandir el terrorismo, afirmando además:
«Si os preocupan (los refugiados sirios), dejad de apoyar a terroristas.»
El Estado Islámico, después de una fuerte financiación en sus orígenes, ha llegado a convertirse en una organización financieramente sostenible, gana millones de dólares por la venta de petróleo. Oro líquido cuyo principal cliente es, curiosamente, la élite mundial, encargada de ofrecernos dicho petróleo en las gasolinera europeas.
El 22 de Agosto de 2014 un titular se extendía por los medios de comunicación de todo el mundo:
Hollande confirma que Francia envió armas a rebeldes sirios.
En Informe Insólito condenamos toda forma de violencia y enviamos todo nuestro apoyo a los amigos y familiares de las víctimas en los fatídicos atentados de París. En los próximos días continuaremos informando sobre más datos que ocultan los medios de comunicación.
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