Avistamientos OVNI: Las Navidades que trajeron los OVNIS a Madrid Barajas

4
9313

En la noche de Navidad del 25 de Diciembre de 1980, varios Objetos Voladores No Identificados invadieron el espacio aéreo del Aeropuerto Internacional Madrid Barajas Adolfo Suárez. No solo lo sobrevolaron sino que invadieron el propio espacio aéreo sobre sus pistas. Una noche que media Europa recuerda todavía, marcada por sucesivos avistamientos OVNI. Os lo cuento en Informe Insólito…

Bienvenidos a bordo de nuevo, amigos de Informe Insólito. Hoy de nuevo, a través de nuestra sección de Misterios Aéreos, despegamos rumbo hacia la Europa Occidental, donde las Navidades de 1980 marcaron un recuerdo clave dentro de la historia OVNI de nuestro continente. Durante aquellos días, surgieron en los cielos europeos distintos avistamientos OVNI que, al final, resultaron ser más que simples avistamientos de Objetos Voladores No Identificados. Los principales testigos de aquellos avistamientos fueron los cielos de España, Portugal, Francia e Inglaterra que, durante la noche del 25 de Diciembre de 1980, fueron testigos de excepción del movimiento y vuelo de algunos objetos desconocidos y misteriosos que recorrieron parte de Europa Occidental desde el Sur hacia el Norte.

En los cielos de Atienza, en Guadalajara (España), varias personas pueden divisar un objeto misterioso en forma de esfera que portaba tres luces de color rojo intenso, el cual dejaba una estela del mismo color y con la misma tonalidad en medio de la noche.

Esa noche precisamente sucedía el famoso caso OVNI de la base aérea militar de Woodbridge, en Rendelshan (Reino Unido), cuando aterrizó un Objeto Volador No Identificado delante de los mismísimos ojos de decenas de militares y otras autoridades del lugar. Incluso hoy en día, este sucesos todavía sigue siendo investigado a fondo por parte de los principales ufólogos británicos. Así se abría una nueva noche de Navidad en Europa donde los sucesos relacionados con el fenómeno OVNI no habían hecho más que comenzar. El aterrizaje en la base militar de Woodbridge era el suceso que abría el telón aquella noche. Pero un segundo avistamiento OVNI tuvo en vilo a parte de Europa desde las 21:05 horas de aquella noche. A esa hora, un Objeto Volador No Identificado luminoso, que dejaba una estela de color anaranjado, pudo ser divisado en los cielos de Lisboa, en Portugal, y sobre otras poblaciones portuguesas cercanas. El rádar del aeropuerto de Lisboa detectó perfectamente el OVNI luminoso que volaba en dirección Noreste.

En el «Caso Landrum», los testigos pudieron observar como varios helicópteros de color totalmente negro, y sin ningún tipo de distintivo, perseguían a aquel OVNI. La desgracia del suceso fue que los testigos sufrieron severas lesiones, ocasionadas por la gran cantidad de energía calorífica que aquel OVNI en forma de diamante desprendía.

Segundos después de su paso por Lisboa, en los cielos de Faro, también en Portugal, se detectan un grupo de objetos misteriosos también luminosos, volando en formación geométrica y que volaban con dirección Norte. Hacia las 22:00 horas de esa misma noche, se detectan nuevos OVNIS, en concreto solamente uno de forma ovalada y que desprendía mucha luminosidad, sobre los cielos de la localidad gallega de Begonte, en la provincia de Lugo, España. Media hora más tarde, alrededor de las 22:00 horas y en los cielos de Atienza, en Guadalajara (también en España), varias personas pueden divisar un objeto misterioso en forma de esfera que portaba tres luces de color rojo intenso, el cual dejaba una estela del mismo color y con la misma tonalidad en medio de la noche. Los testigos lo describieron como un OVNI en forma de balón de voleibol, que volaba hacia la zona de Zaragoza, hacia el Noreste de España.

Tras estos hechos, llegaban informaciones de la región de Turrena, en Francia, que afirmaban que varios testigos habían podido avistar un objeto similar, pero entre las 21:00 y las 21:10, hora peninsular. Con todas estas informaciones, si nos hacemos una composición de los hechos en cuanto a horas y lugares, está claro que en Europa se estaban viendo casi simultáneamente, distintos OVNIS sobrevolando los cielos. Hubo un testigo en Cuenca, en la zona de Casas de Guijarros, que describió el avistamiento OVNI de una manera más gráfica y más precisa, señalando que aquel objeto misterioso llevaba una luz roja fija y que estaba fija en el cielo cuando la divisó hasta que comenzó a moverse en vuelo. El OVNI dejaba a su paso una estela de color entremezclado rojo y anaranjado y a medida que cambiaba de rumbo, parecía emitir también luces tipo flash. De repente, otro objeto apareció a su lado y, aunque era de dimensiones más pequeñas, tenía exactamente las mismas características.

El 25-12-1980 sucedía el famoso caso OVNI de la base aérea militar de Woodbridge, en Rendelshan (Reino Unido), cuando aterrizó un Objeto Volador No Identificado delante de los mismísimos ojos de decenas de militares y otras autoridades del lugar. En la foto, la torre de control del aeropuerto de la base militar.

Este testimonio coincidiría con el testimonio de otros testigos al Norte de Madrid. Desde allí pudieron observar un primer objeto volador de color amarillo anaranjado que también dejaba una estela tras de sí, seguido de otro segundo objeto volador de mayores dimensiones pero de color blanco azulado. Esto se observó a las 22:10 horas de aquella noche del 25 de Diciembre de 1980 y los testigos afirmaron que los OVNIS no volaban a más de 15 metros de altitud. Es cierto que estos testigos no tenían buenas referencias visuales para acertar exactamente con la altitud de vuelo de los OVNIS pero lo cierto es que se comprobó posteriormente los Objetos Voladores No Identificados habían realizado prácticamente vuelos rasantes sobre el terreno. Aquellos OVNIS se detuvieron en seco sobre la población de Barajas, en Madrid, la zona donde se sitúa el Aeropuerto Internacional Adolfo Suárez Madrid Barajas y allí emitieron destellos de luz muy fuertes durante al menos 15 segundos. El OVNI de color blanco azulado continuó volando en dirección a Segovia y el OVNI de color amarillo anaranjado cruzó las propias pistas del Aeropuerto de Madrid Barajas y se perdió en medio de la noche.

Un OVNI luminoso, que dejaba una estela de color anaranjado, pudo ser divisado en los cielos de Lisboa, en Portugal, y sobre otras poblaciones portuguesas cercanas. El rádar del aeropuerto de Lisboa detectó perfectamente el OVNI luminoso que volaba en dirección Noreste.

Aquella noche de Navidad de 1980, sin duda, escribió uno de los capítulos más importantes de la historia dentro del fenómeno OVNI a nivel europeo. 4 días después, el 29 de Diciembre de 1980, ya fuera del continente europeo y aún no sabiendo si estaba relacionado o no con lo ocurrido en Europa, sucedió un episodio muy grave en los EEUU, en la zona de Texas, en concreto en una región situada entre Huffman y Cleveland en Houston, cuando dos mujeres y un niño fueron testigos de otro insólito avistamiento en los cielos americanos. Pudieron contemplar cómo les sobrevoló un Objeto Volador No Identificado que tenía forma de diamante y que desprendía una gran cantidad de calor por debajo. De hecho, además, pudieron observar como varios helicópteros de color totalmente negro, y sin ningún tipo de distintivo, perseguían a aquel OVNI. La desgracia del suceso fue que los testigos sufrieron severas lesiones, ocasionadas por la gran cantidad de energía calorífica que aquel OVNI en forma de diamante desprendía. El caso se bautizó como el suceso “Cash-Landrum”.

Las lesiones que tuvo Vicky Landrum aquella noche de las Navidades de 1980, en la prensa de los EEUU; tras el avistamiento sufrió fiebres, mareos, vómitos, pérdidas de equilibrio y descontrol de su sistema nervioso. Si la influencia de esas microondas es más prolongada en el tiempo y de mayor duración, los síntomas son aún más graves y se le llama “Síndrome de Astenia”.

Los científicos estudiaron durante mucho tiempo este caso en EEUU. Llegaron a la conclusión de que si unos ojos humanos están sometidos durante al menos 3 segundos a una emisión de microondas en una frecuencia superior a 3000 MHz, se pueden dañar con lesiones graves como paralizaciones o cataratas. Fueron las lesiones que tuvo Vicky Landrum aquella noche de las Navidades de 1980; tras el avistamiento sufrió fiebres, mareos, vómitos, pérdidas de equilibrio y descontrol de su sistema nervioso. Si la influencia de esas microondas es más prolongada en el tiempo y de mayor duración, los síntomas son aún más graves y se le llama “Síndrome de Astenia”. Los afectados pasan a sufrir debilidad corporal, miedos irracionales, tendencias antisociales, incapacidad de tomar decisiones, etc… curiosamente los mismos síntomas que suelen hallarse en testigos de casos OVNI.

Dos mujeres y un niño fueron testigos de otro insólito avistamiento en los cielos americanos. Pudieron contemplar cómo les sobrevoló un Objeto Volador No Identificado que tenía forma de diamante y que desprendía una gran cantidad de calor por debajo.

Como podéis leer, aquellas Navidades de 1980 marcaron a ciertas personas para siempre, sobre todo a los testigos directos de los avistamientos OVNI en Europa y en los EEUU. Y como podéis observar, a algunos los dejaron marcados físicamente dentro de la peligrosidad que estos hechos provocan. Os espero en el próximo vuelo del misterio, amigos de Informe Insólito…

 

Compartir
Iván Castro Palacios
Piloto comercial, instructor de Auxiliares de Vuelo y Piloto de Drones - RPAS e investigador de misterios aeronáuticos. Colaborador de Espacio en Blanco en RNE, de RTV Onda Azul de Málaga, de PTV Málaga Televisión, de La Noche de Andrómeda en LNDA Radio, de Otros Mundos con Javier Belmar, de Ya Te Vale FM, de Informe Enigma con Jorge Ríos, de Días Extraños con Santiago Camacho y de Misterio en Red con Esteban Palomo. Contacto: ivancpmisterio@yahoo.es

4 Comentarios

  1. En la primavera del 1981, poco después de la oleada que comentas, sufrimos el misterioso «síndrome tóxico» que se atribuyó al aceite de colza desnaturalizado. Mi familia y yo lo consumíamos, como muchos de mis vecinos de Mérida, y aunque lo retiraron, no sufrimos ningún síntoma. Si no fue el aceite de colza, ¿se podría relacionar el síndrome tóxico con los misteriosos incidentes OVNI de un par de meses antes? Recordemos que empezó en barrios de Madrid, ¿el avistamiento de Barajas?. Ya no recuerdo donde leí que antes de los primeros afectados «oficiales» en Abril del 81, había habido otra mini-epidemia de «legionelosis» relacionada con la base de Torrejón de Ardoz. Naturalmente no hay pruebas…

      • Demasiado lejos, si creemos que todos los OVNIs son naves extraterrestres. Para mí, son simplemente objetos volantes no identificados. Que pueden tener un origen muy terrestre. Y el aceite de colza desnaturalizado y disfrazado de aceite de oliva fue una guarrada, pero no el arma química causante del Síndrome Tóxico. Curiosamente, la explicación más completa la realizó el ufólogo Andreas Faber Kaiser en «Pacto de Silencio», inencontrable en su tiempo, pero que ahora la pude comprar en edición completa. O en varios artículos suyos. Como te dije, yo consumía aceite de colza del que prohibieron, y no pillé el Síndrome Tóxico, ni ninguno de mis conocidos. Pero sí oíamos en la tele al Ministro de Sanidad diciendo que el Síndrome lo causaba «un bichito tan pequeño que si se caía al suelo se moría». Y así me he vuelto tan desconfiado con las versiones oficiales.
        Gracias, Iván, y pienso que sería interesante un artículo sobre lo sucedido entonces (no la versión oficial, claro…)

        • Seguramente que Juanjo, nuestro biólogo profesional estará encantado de hablar en algún artículo sobre la colza. Un abrazo Josep. Gracias de nuevo por tus comentarios.

Dejar una respuesta